PACO MORALES
El que hoy se alza como uno de los primeros espadas de la gastronomía española vino al mundo en la primavera de 1981, en el barrio cordobés de Cañero. Nacido en el seno de una familia volcada en cuerpo y alma a la hostelería -sus padres regentan el afamado Asador de Nati-, se empapó del amor por el oficio mientras ayudaba en el negocio, con la adolescencia recién estrenada. Cuando, poco después, comenzó a estudiar cocina en la escuela de hostelería de su ciudad, no tardó en llamar la atención de sus profesores por su carácter metódico y disciplinado, y por su comportamiento ejemplar a pie de fogón. Los premios y las distinciones no se hicieron de rogar para ese joven Paco Morales. Lo mismo ocurrió con los retos... Con poco más de 20 años, se estrenó bajo las órdenes de Andoni Luis Aduriz en Mugaritz** (Rentería). Con 23 recién cumplidos, se trasladó a Cala Montjoi (Girona) para liderar la partida de entrantes tibios de elBulli. Tras ello, llegarían interesantes etapas en Madrid y en Bocairente (Valencia), donde obtuvo su primera estrella Michelin. “Nuestra mochila está cargada con media vida de experiencias. Entre ellas, se encuentra mi paso por las mejores cocinas del mundo”, explicaría años después, al presentar en sociedad los detalles de lo que sería NOOR Restaurant. “Eso ha sido definitivo y ha marcado mi carácter y mi forma de ver la gastronomía de modo indeleble y muy positivo”.
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